SANTIAGO.- El Procurador de Medio Ambiente de Santiago, magistrado Jacinto Mejía, clausuró de manera provisional la planta expendedora de gas licuado de petróleo de la empresa PROPAGAS, localizada en el reparto Oquet y en la entrada a las urbanizaciones SAVICA y Mejoramiento Social.
Para reforzar el dictamen, en la parte frontal del negocio se colgó un letrero que informa el cierre temporal, por lo que estará bajo la responsabilidad de la autoridad policial garantizar lo dispuesto por el Ministerio Público.
Con la medida, el responsable de Medio Ambiente, acoge y cumple lo dispuesto por una jueza la Cámara Civil de la Jurisdicción del Departamento de Justicia de Santiago, que mandó a paralizar las gestiones de venta del establecimiento, con lo que escuchó el clamor de peligro expuesto por varias juntas de vecinos de las comunidades afectadas con el negocio surgido bajo muchas protestas desde que se conoció su instalación.
Explica Medio Ambiente, que la estación de PROPAGAS estará cerrada hasta que un juez decida sobre su estatus.
Como la clausura no es definitiva, sino circunstancial, Medio Ambiente no procedió a incautar los equipos utilizados en el depósito y trasiego del combustible a los compradores.
El magistrado Mejía informó, que se colocaron precintos de seguridad para evitar la venta del carburante, y que en ese tenor, del área de negocio se hizo sacar un tanquero, presumiblemente presto para abastecer los depósitos.
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